miércoles, 11 de noviembre de 2015

El perfil emocional.

 
  Es un conjunto de rasgos o características que explican el modo en el que reaccionamos ante las emociones.

  6 dimensiones:
     
     -Resilencia: rapidez o lentitud con la que alguien se recupera de la adversidad.

     -Actitud: el tiempo que somos capaces de hacer que dure una emoción positiva.

     -Intuición social: Pericia o habilidad a la hora de captar las señales sociales que emiten las personas que uno tiene a su alrededor.

     -Autoconciencia o conciencia de sí: modo en el que percibimos los sentimientos corporales que reflejan las emociones.

     -Sensibilidad al contexto: cómo se nos da regular nuestras respuestas emocionales para tomar en cuenta el contexto en el que nos encontramos.

     -Atención: lo clara y enfocada que es tu concentración.

   






    Respecto a eso, mi perfil emocional es:

     Mi resilencia es alta, lo que quiere decir que no me recupero rápidamente. Por ejemplo, cuando no hace mucho tiempo he sentido un dolor profundo por la pérdida de un familiar, me he dado cuenta de que me va a llevar tiempo recuperarme, o cuando algo no me sale bien y es por mi culpa, puedo estar un día entero pensando en ello.
 
   Respecto a mi actitud, no me definiría como una persona negativa o positiva. Siempre intento ser realista y ver el lado bueno y malo de todo, aunque muchas veces creo que me supera la negatividad.
 
 Hablando sobre mi intuición social, es decir, habilidad de captar las señales sociales, tengo mucha rapidez en ese aspecto, capto con facilidad las señales que emiten las personas de mi alrededor, y no tengo dificultad en ello. Por ejemplo, si una persona tiene algo que le preocupa, por medio de posturas, forma de hablar o gestos insignificantes,me doy cuenta de ello.

   Si hablamos de mi autoconsciencia, que la definiríamos como "consciencia de sí", diría que mi autoconsciencia es baja, opaca a sí misma, no me doy cuenta en ocasiones de lo que ocurre en mi interior, no me conozco lo suficiente respecto a mi interior. Por ejemplo, si estoy inquieta y me preguntan el por qué, no sé responder con facilidad.

   Si quisiera definir mi sensibilidad al contexto, que quiere decir capacidad de regular nuestras respuestas emocionales para tomar en cuenta el contexto en el que nos encontramos, me definiría como una persona con gran habilidad en eso. Por ejemplo si una persona está triste por algo personal y a mí me ha ocurrido algo muy bueno, sé adaptarme y controlarme.

   Respecto a mi atención, me cuesta mucho concentrarme en un medio que no es habitual para mí. Por ejemplo, tengo que estar en total silencio para concentrarme en un examen o en estudiar.



 Así sería mi perfil emocional.

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